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Una de las figura emblemáticas del paddock WorldSBK durante años, Loris Baz, regresará pronto a las pistas con la marca de los diapasones. El anuncio ha llegado después de largos meses de incertidumbre sobre el destino del popular piloto francés.

Entre el alivio y la impaciencia, Baz ha hablado con WorldSBK.com sobre este nuevo reto poco después de la rueda de prensa celebrada el martes en Assen. 

Este año vuelves a WorldSBK de la mano de Yamaha. ¿Cómo nació este proyecto?

"Al final de la temporada 2018, realmente no había plazas disponibles. Hablé mucho con Éric Mahé, mi manager, y acordamos firmar solo con la garantía de poder luchar en las posiciones delanteras. Esta oportunidad no se presentó en el paddock de WorldSBK, por lo que también estudiamos las opciones en los campeonatos inglés y estadounidense, pero sin encontrar nada prometedor. Entonces decidimos arriesgarnos a pasar una temporada en blanco, aunque Eric me dijo que algo pasaría forzosamente con Ten Kate sin poder prometer nada concreto... Al final del año, el proyecto Ten Kate/Yamaha comenzó a tomar forma. Para mí era algo muy interesante y emocionante. Nos hubiera gustado que se hiciera más rápido, pero tanto para mí como para ellos el final de la temporada había sido complicado, por lo que la situación fue evolucionando poco a poco. Aún así, estoy muy contento, Yamaha es una marca que me gusta especialmente, comencé con ella que, gracias a Jean-Claude Olivier. Estoy realmente impaciente por empezar".

¿Es un proyecto a largo plazo, o solo para este año?

"Un poco ambas cosas. Por ahora, nos estamos centrando en este año. Esperamos comenzar nuestra temporada en Imola y tener éxito lo antes posible. Después de eso, aunque para el próximo año todavía no se ha firmado nada, mi objetivo y el del equipo es continuar durante varias temporadas para evolucionar y trabajar juntos".

¿Cuál es el apoyo que proporciona Yamaha en comparación con el equipo oficial o el GRT?

"Yamaha ha implementado un programa para “clientes", lo que significa que mi moto es la misma que se entregó a Crescent y a GRT. Durante la temporada, si hay cambios, el equipo oficial será el primer beneficiario. De hecho, la única diferencia entre mi moto y las otras serán los frenos, nosotros trabajaremos con Nissin. La buena noticia es que tendremos una moto ya exitosa, no hay desarrollo que hacer, así que espero ser competitivo desde el principio".

¿Cuáles son tus metas para la temporada en cuanto a resultados?

"Estamos cogiendo el tren en marcha, la temporada ya ha comenzado. Pero con una moto que ya está desarrollada, seguramente podremos estar delante. También hay que pensar que llegaremos directamente en un fin de semana de carrera, sin ensayos previos... será un descubrimiento, y será importante coger nuestras referencias. Pero durante el resto de la temporada, el objetivo será sacar el máximo provecho de la moto y luchar por el podio".

¿Cómo ha sido tu programa de entrenamiento? ¿Has podido contar con una R1 para rodar?

"He pasado el invierno como lo hago cada año. Incluso intensifiqué mi programa, fue una preparación física muy intensa. También he hecho motocross, he rodado en hielo, y tengo previsto hacer un poco de supermotard en España. De momento todavía no he rodado con una  R1, estamos hablando con el equipo para saber cuándo recibirán las motos. Pero aunque no sea una Superbike, quiero entrenarme en una versión estándar antes de las carreras, paras hacerme una idea y comenzar a tener referencias".

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